Derecho al olvido en Internet – 2da parte

Anteriormente, ya estuvimos hablando sobre el Derecho al olvido en Internet, medida legal implementada por la Unión Europea y que obliga a Google a eliminar de sus resultados de búsqueda los enlaces a páginas que algún usuario solicite respaldándose en dicho derecho.

Como sea, empiezan a salir datos interesantes sobre el asunto, mismos que se han conocido a través de la carta que Google ha enviado a la UE informando de lo que está realizando para cumplir con la ley.

Según los datos aportados por Google que en recolección y medición de datos se pinta solo, desde mayo de este año que entró en vigor la ley, han recibido solicitudes de más de 91.000 personas que afectan a más de 328.000 URLs.

Al parecer, hasta el 18 de julio Google ha eliminado un poco más del 50% de estos enlaces. Del monto restante, un 32% ha sido rechazado y un 15% está temporalmente detenido en espera de más información.

También se han hecho públicas algunas estadísticas de solicitudes recibidas por países de la UE. Los 5 países con más solicitudes son los siguientes.

  1. Francia: 17.500
  2. Alemania: 16.500
  3. Reino unido: 12.000
  4. España: 8.000
  5. Italia: 7.500
  6. Países Bajos 5.500

Google también menciona que muchas personas han mentido al ingresar sus datos en el formulario que se llena para pedir el retiro de determinados enlaces. Esto vuelve a llamar la atención sobre la forma en que fue pensada esta ley y los mecanismos que se aplican para llevarla a cabo y, en el mejor de los casos, no queda muy claro el asunto.

Por mencionar un ejemplo acaecido hace poco.

Un periódico británico, The Guardian, protestó ante la retirada de sus noticias sobre un árbitro de futbol al que habían pillado mintiendo sobre la decisión de un penalti. Hasta el momento, aun no tienen claro quien hizo la petición de retirada de esos datos; ya sea por una coincidencia del nombre con otra persona o por la mala fe de alguien.

Para añadirle más chicha al guisado, al recibir la notificación por parte de Google sobre la no indexación de sus contenidos, volvieron a hablar del tema. Con lo que consiguieron el efecto contrario al deseado por el solicitante: en lugar de desaparecer lo que ha pasado, se habla aún más de lo ocurrido.

En fin, que esto no está funcionando como se esperaba, más que nada porque aparentemente no se pensaron correctamente los mecanismos que resguardaran el proceso de posibles errores o la mala fe de algún vivillo. Y es que esto se puede prestar a muchos malos manejos ya que, más que derecho al olvido en internet se está pareciendo a un mecanismo para ocultar y silenciar cosas.

Imaginemos a un político en plena campaña electoral, un médico que quiere borrar opiniones negativas de sus pacientes o un pedófilo que quiere sepultar información de sus delitos. No me extrañaría que dentro de algunos años, por ejemplo, sea muy difícil encontrar información sobre los escándalos y crímenes políticos que se están dando en estos días en España. O en cualquier otro país.

Al final, no puedo dejar de escuchar la voz del abuelo cuando me decía: “Piensa mal y acertarás”.